jueves, 14 de noviembre de 2019

Sedum sediforme_CRASSULACEAE




Experiencia 1_Siempre estuvieron cultivados en exterior, en zonas frescas o con algo de protección solar como malla de sombreo discontínua. El resultado fué muy bueno, resultó ser una planta muy dura aunque de crecimiento algo lento. Cuando es grande adquiere un porte muy bueno y tupido que le da muy buen aspecto. La floración es muy característica por presentar tallos fértiles caducos que cambian de color con la floración. Su verdor y frondosidad, junto a su gran tamaño, hacen de esta planta un buen motivo para macetas de tamaño medio a grande y para el jardín. Pasó muy bien tanto el verano como el invierno y aguantó tanto los retrasos en el riego como sus excesos, si bien tiende a encotrarse mejor con frescor, humedad y buena iluminación. El sustrato se enriqueció siempre con gravilla de tamaño medio a grande. La planta luce mucho más cuando pasa el tiempo y está bien desarrolada. Las fuertes lluvias estacionales del invierno, sin descanso, la dañaron produciéndole tallos negros que acabaron con parte de la planta. Hubo que resguardarlas en invernadero para evitar el efecto putrefactor de tanta agua en el sustrato durante muchos días seguidos. A pesar de tener sustrato permeable en el recipiente, no resistió tanta humedad continuada en el sitema radicular y sin alternar con días de sequedad. En el jardín, en cambio, aguantó mucho mejor. Posiblemente la abundancia de tierra y las alternativas que tienen las raíces en el terreno le permitann encontrar zonas más secas y aireadas que las que encuentra en una maceta plástica.